Corría el año 2005. La humanidad pensaba que lo tenía todo, con su incipiente Internet y sus conversaciones interminables de Messenger. Entonces ocurrió algo. YouTube irrumpió en nuestras vidas de millennials empedernidos para llenarlas de felicidad. Poco tardaron en crearse mil canales de cocina, de cantantes amateurs haciendo covers o de tutoriales de lo más variopintos. Pero lo que en esta entrada queremos tratar no es eso. Venimos a hablar de esa maravilla de la ciencia conocida como vídeos virales. Para aquellos que estén leyendo esto desde otro planeta o aquellos que vivan en una aldea medieval liderada por un amish loco, un vídeo viral se trata de un producto audiovisual que se propaga por la Red tan rápido como la pólvora. Estos vídeos suelen tener una vida efímera a pesar del impacto que suelen crear en el momento, ya que siempre aparecen nuevas maravillas para captar la atención de los internautas. La Salchipapa de Leticia Savater o el Mannequin challenge del equipo de Cleveland de la NBA en la Casa Blanca son dos ejemplos actuales que ilustran este concepto. Si habéis visto los dos virales os habréis percatado de que la genialidad de ambos radica en su absurdez. Y curiosamente esta suele ser una proporción directa, a cuanto más sin sentido es el contenido del vídeo, más probabilidades de éxito tiene.
Ya llevamos 16 años alimentando nuestra sed de estupideces con todo tipo de virales, pero… ¿Quién se acuerda de esos antiguos vídeos que nos hicieron reír hasta reventar? En la redacción de NPC nos hemos puesto nostálgicos y queremos recordar esas joyitas vintage del audiovisual que tantos buenos ratos nos dieron en nuestra adolescencia. Allá vamos.
- Contigo no, bicho
El alcohol siempre es el causante de todos nuestros problemas, como diría Homer Simpson, pero en ocasiones puede provocar que ocurran cosas mágicas como esta (aun así no bebáis jamás, insensatos). El protagonista solo pedía “un cochino beso” y acabó haciéndose famoso en Internet. Aunque ya tenga casi una década, un clásico como este nunca pasará de moda. Para ser feliz hay que visionarlo como poco una vez al año.
- El heavy satánico de la pierna gangrenada
Nada más y nada menos que 8 años han pasado desde que esta escena tuvo lugar. Probablemente lo que ocurría en “El diario de Patricia” estaba totalmente guionizado, pero aun así esta performance no tiene desperdicio. Tras ver el video por decimoctava vez solo me queda suplicaros que hagamos una recogida de firmas en Change.org para que vuelva este maravilloso programa.
- Ayúdame, yo tengo muchos “quereseres”
Hace 7 años, dos jovencitas inglesas decidieron ocupar su tarde grabando un video para su clase de español del instituto. Después se les ocurrió la magnífica idea de subirlo a YouTube. A día de hoy la broma cuenta con más de cinco millones de visualizaciones. Se supone que debía ser un video didáctico, pero hay partes que dan verdadero terror. Comprobadlo vosotros mismos.
- David after dentist
Retrocedamos al año 2009. «Ojalá estar flipándolo como ese niño» fue lo que todos pensamos al ver al ver los ataque espontáneos del pequeño David, admitámoslo. Desde aquí damos las gracias a su padre por tener la rapidez de captar el momentazo.
5. Ding ding dong song
Pretendía ser una parodia de una canción bastante pegadiza de Günther & The Sunshine Girls, pero al final acabaron siendo ellos los parodiados. Hace 6 años estos dos chicos se pusieron ante la cámara y conquistaron los corazones de todos los fieles amantes de Youtube con su genial interpretación.
Si queréis una segunda parte de vídeos virales que marcaron nuestras vidas, ¡denle like y suscríbanse!
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